A pesar de esta fortaleza, ella cree que hay aspectos de su psicología donde hay espacio para mejorar, tanto dentro como fuera de la pista.

“Mentalmente, he dado algunos pasos, jugando de forma más agresiva”, agregó.

“Fuera de la pista, reo que soy un poco perfeccionista, pero eso no siempre es bueno porque tal vez a veces necesito descansar un poco o desacelerarlo un poco, pero sigo diciendo: ‘Sí, pero todavía tengo que ¡Trabajar en esto! ‘”

Entrenando en la academia de la leyenda del tenis belga Kim Clijsters, recibe una amplia variedad de comentarios diariamente, desde los de la cuatro veces campeona de Grand Slam a los del entrenador Rick Vleeshouwers y de su familia, pero esto es algo que ella aprecia.

“Todos tienen sus propios consejos, pero es bueno tener opiniones diferentes”, dijo.

“El tenis es un deporte muy individual, por lo que es bueno volver a casa y sentir a ese grupo a tu alrededor”.

En las próximas semanas, Mertens puede esperar el desafío de llegar a la segunda semana del Abierto de Francia por segunda vez, habiendo caído en la cuarta ronda el año pasado, mientras que Wimbledon también está en el horizonte, donde llegó a la tercera ronda en tanto en individual como en dobles en 2018.